Espacio para la reflexión y discusión del sector de la Acción Integral contra Minas Antipersonal en Colombia
19 septiembre 2024
Bogotá, 19 de septiembre de 2024
El evento Espacio para la Reflexión y Discusión del Sector de la Acción Integral contra Minas Antipersonal en Colombia, organizado por el Servicio de Naciones Unidas para la Acción contra Minas - UNMAS, en colaboración con OCHA Colombia, UNICEF Colombia y el grupo AICMA, pretende visibilizar, reflexionar y debatir sobre los desafíos de la Acción Integral Contra Minas Antipersonal (AICMA) en Colombia. Este espacio se creó para fortalecer alianzas y coordinar esfuerzos para hacer frente al deterioro de la situación humanitaria en el país, entre diferentes actores como la comunidad de donantes, el sector privado, la sociedad civil, el Gobierno de Colombia, la academia y las Naciones Unidas.
Durante el evento, se presentaron los últimos hallazgos sobre la crisis humanitaria, destacando el preocupante aumento en el uso de artefactos explosivos, que ha afectado gravemente a civiles, especialmente a comunidades étnicas, niños, niñas y adolescentes. Uno de los datos más preocupantes de los últimos 12 meses, es el registro de incidentes relacionados con minas antipersonal (MAP) y municiones sin explotar (MSE) en 36 municipios previamente considerados libres de minas. Además, entre enero y julio de 2024, se destacó que el 45% de las víctimas de artefactos explosivos fueron niños, niñas y adolescentes. Asimismo, se subrayó la desproporcionada afectación a las comunidades étnicas, que representaron el 54% de las víctimas civiles en el mismo periodo.
Esta preocupante situación ha sido exacerbada por la transformación de las dinámicas del conflicto armado en Colombia, el desconocimiento del Derecho Internacional Humanitario (DIH) y las disputas territoriales entre Grupos Armados No Estatales. Estos factores han provocado un incremento en el uso de minas antipersonal y artefactos explosivos improvisados, lo que ha tenido un impacto devastador en la población civil. Las víctimas no solo sufren heridas físicas y traumas psicológicos, sino que también enfrentan restricciones severas en el acceso a recursos esenciales como tierras, alimentos y agua. Estas condiciones agravan el confinamiento de las comunidades y limitan su movilidad, dificultando además la respuesta humanitaria debido a la creciente contaminación por explosivos en las zonas afectadas.
Regiones como Arauca, Cauca, Nariño, Antioquia y Bolívar han sido particularmente golpeadas por estos artefactos dañando escuelas, viviendas y otras infraestructuras esenciales, afectando de manera desproporcionada a las comunidades rurales y en particular a niños, niñas y adolescentes. Este uso indiscriminado de los artefactos explosivos constituye una grave violación de los principios de distinción y proporcionalidad del DIH, comprometiendo el bienestar y la seguridad de las comunidades más vulnerables. Ante este panorama, es urgente implementar medidas que prioricen la protección de estas poblaciones.
"Queremos mantener viva una conversación bien importante, que es el estado de situación en relación al impacto de minas antipersonal en Colombia, a través de la concientización, la colaboración y el financiamiento de las acciones que Colombia necesita proteger en un momento donde el impacto de las minas en las comunidades, pero también naturalmente en los liderazgos y en las representaciones de derechos humanos de los territorios está más en peligro", - anotó Mireia Villar, Coordinadora Residente de Naciones Unidas en Colombia, durante la apertura del evento.
Uno de los retos principales para la Acción Contra Minas, con el apoyo de Naciones Unidas, es garantizar una priorización adecuada de las intervenciones en los territorios más afectados. En particular, es esencial proteger los centros educativos rurales, donde la presencia o sospecha de artefactos explosivos pone en riesgo la seguridad y el derecho a la educación de los niños y jóvenes. Con un modelo operativo sólido, Colombia cuenta con materiales educativos pertinentes y organizaciones capacitadas en Educación en el Riesgo, que están listas para apoyar la permanencia escolar y reducir los peligros que estos artefactos representan para las generaciones más jóvenes.
El Representante de UNMAS, Sr. Antonio Salvatore Armentano - utilizando unas palabras del ex secretario general de la ONU, Ban Ki-moon - mencionó que “cuando actuamos juntos no hay límite a lo que podemos alcanzar”, resaltando que para el sector contra minas sería de crucial importancia desarrollar mecanismos innovadores de cooperación entre diferentes actores de la sociedad civil, del Sistema ONU, del sector privado, de la academia y del Gobierno colombiano.
La participación activa de donantes, el sector privado, la sociedad civil, el Gobierno colombiano, la academia y las Naciones Unidas en este evento fue clave para resaltar la necesidad de un apoyo sostenido entre todos los sectores involucrados, con el fin de asegurar la efectividad y sostenibilidad a largo plazo de las intervenciones. Los mensajes centrales destacaron la urgencia de mitigar los impactos de los artefactos explosivos y la importancia de una colaboración intersectorial coordinada para abordar la crisis humanitaria.
UNMAS reafirmó su compromiso de seguir apoyando estos esfuerzos, con el objetivo de reducir los devastadores efectos de los artefactos explosivos en el país y fortalecer las capacidades nacionales para hacer frente a este grave problema. Solo a través de la colaboración continua y el compromiso firme de todos los actores será posible mitigar los efectos de estos artefactos y asegurar un futuro más seguro para las comunidades colombianas.